jueves, 30 de enero de 2014

Entendimiento fragmentado = no entiendo nada.


Y haremos
que los mares se dividan y se levanten
observaremos un abrazo cuadro por cuadro de lento
resurgiremos con visión de rayos X
para econtrarnos el sentimiento.

Nos despedazaremos los corazones,
tomaremos cada tejido
y experimentaremos con nuestros temblorosos
cuerpos muertos,
asegurando que por moverse
tienen vida.

Analizaremos el apego de una pareja
el ¿por qué hoy un beso y mañana una caricia?
cuantificaremos los "te quiero"
esperando una teoría
de la ontegenia del enamoramiento.

Nos adentraremos en nuestros cerebros
lo auscultaremos con el pretexto de saber
que en un lugarcito se encuentra la calma
la LUZ que no encontramos
en la cogida vacía de cada mañana.

Nos opondremos a la reflexión del otro
por no poder aceptar que nos hemos equivocado,
nos callaremos por no permitir pensar a los demás
que SÍ, que somos vulnerables,
pero que también pensamos.

¡Qué equivocados estamos!
pues nos han enseñado que para comprender
es mejor fragmentar
pero que alguien me asegure que piensa,
que ama, que abraza, que ríe, que llora
¡que vive!
tan sólo   e n   p e d a z o s.

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